Backstage segment #2 (La hora del té)

Las cámaras enfocan una de las improvisadas cocinas de la Impact! Zone, en la que se muestra cómo hace un rato, se estaba preparando un té, que todos sabemos a quién irá destinado, puesto que no puede ser otro que el nuevo y polémico fichaje de TNA... William Regal.



La imagen cambia y podemos ver a William Regal en su camerino/despacho, donde precisamente se está sirviendo el té que antes vimos prepararse, justo cuando uno de los empleados de TNA toca con los nudillos a la puerta. William Regal observa la identidad del visitante a través del sistema de seguridad instalado a su llegada y comprueba que se trata de un empleado de la empresa, por lo que marca el código de apertura de la puerta y sigue a lo suyo.



Empleado de TNA: ¡Señor Regal, lamento la interrupción, pero me temo que los directivos de la compañía quieren verle inmediatamente y así me han dicho que le informe!

William Regal: ¿Pero qué...? ¡Diablos! ¿es que no ve que en estos momentos estoy ocupado? ¿Se da cuenta de que son las 5 de la tarde, hora del té en mi maravillosa patria Gran Bretaña? La hora del té es algo completamente sagrado para gente como yo, que poseemos modales, integridad y buenos hábitos, no como ustedes, que ni tan siquiera son capaces de respetar una tradición ancestral del país que les colonizó y les enseñó a hablar la lengua que consideran suya...

Empleado de TNA: Lamento mucho lo ocurrido, Señor Regal... pero sólo quería informarle de que los directivos exigen hablar con usted después de lo que ha pasado en el Parking el otro día.

William Regal: ¡¡Pues los directivos van a tener que esperarse a que me acabe el té, demonios!! ¿O es que se creen más importantes que nadie en este mundo? Lo sabía... no tenía que haber venido a Estados Unidos, ya que está lleno de megalómanos, prepotentes e impertinentes.

Empleado de TNA: Señor, lamento la insistencia, pero tiene que...

William Regal: ¡Ya le he oído, y ahora oigame usted a mí, pequeño ser despreciable! ¡Le he dicho que ahora mismo NO IRÉ al despacho del GM porque tengo cosas más importantes que hacer! Usted mismo lo ha podido ver.

William Regal acaba de servirse el té y comienza a mostrarse un tanto impaciente mientras sigue hablando con el empleado de TNA.



Empleado de TNA: Eh... de acuerdo, Señor Regal, así se lo comunicaré.

William Regal: Más le vale, pequeña habichuela, porque de lo contrario me ocuparé personalmente de que no vuelva a trabajar aquí... y créame, soy capaz de éso y de mucho más.

Empleado de TNA: ¡Por favor, señor Regal... no haga éso! Le juro que no volveré a molestarle...

William Regal: Por su propio bien, espero que sea sincero y que esa palabra tenga cierta validez, porque odio a los que incumplen su palabra... la mentira es algo que hay que erradicar de este mundo, y si para ello hay que ir eliminando a sus portadores, que así sea.

William Regal cambia de tono a uno mucho más exasperado y mira friamente al empleado de TNA antes de dirigile unas duras palabras, que son cortadas por las frases entrecortadas del propio empleado.



William Regal: ¿Le ha quedado claro?

Empleado de TNA: Oh, sí... Señor Regal... ¡desde luego que sí! No volverá a suceder.

William Regal: Estúpidos americanos...

William Regal se harta de la situación y amenaza de una forma directa al empleado de la compañía mientras le señala el camino de salida. Finalmente, el empleado desiste de intentar dialogar y se va de allí.



Empleado de TNA: Señor Regal...

William Regal: ¿Qué desea ahora?

Empleado de TNA: Le recuerdo que la directiva de...

William Regal: ¡Dios bendito!, ¿es a causa del aire que se respira aquí o es que a todos los americanos les golpeaban en la cabeza cuando eran bebés? ¡Lárguese de aquí ahora mismo o seré yo quien lo eche a patadas!

Por fin, William Regal teclea el código de cierre de la puerta, se acomoda en su mullido y caro asiento y comienza a degustar el té... aunque no sin cierto desconcierto.



William Regal: ¿Y ahora qué ocurre con el té? Este sabor... ¿aguado? ¿el té está aguado?

William Regal toma otro sorbo del té y profiere un estertor de arcada tremendamente vistoso.



William Regal: ¡En el nombre de Elizabeth II, Reina de Inglaterra! ¡¡Un té aguado y con sacarina!! ¿¿Pero es que ni tan siquiera saben hacer un té en este país tercermundista?? Me parece que aquí va a haber que hacer unos cuantos arreglos, empezando por esta apestosa compañía... pero todo a su tiempo... quizá haya gente con honor, lealtad y decencia en este agujero... todo será cuestión de encontrarla.

[FIN DE LA PROMO, OPINAD SI QUEREIS]